Nosotros

NOSOTROS – YEVGUENI ZAMIATIN Escrita en 1920 (¡hace más de cien años!), esta novela es la primera novela distópica propiamente dicha (aunque anteriormente habíamos visto “el último hombre” de Shelley se consideraba la precursora de la distopía, pero carecía del elemento ciencia). Sirvió como modelo a Orwell y Huxley (1984 y Un mundo feliz, respectivamente). Zamiatin se auto exilió de Rusia, previo escribirle una carta al mismísimo Stalin, para pedirle que lo dejara salir del país. Ingeniero y matemático de alma (como notaremos en “Nosotros”) comenzó a escribir estando en Rusia, pero la crítica lo destrozó y su vida se vio afectada por sus obras (de tono político). “Nosotros” fue publicado originalmente en inglés en 1924 y recién se conoció en Rusia, su país natal en 1988, mismo año en que se publicaba 1984 de Orwell. La novela es extraordinaria desde el punto de vista que se lo quiera mirar; literario, político, narrativo, morfológico, poético, etc. Si leyeron 1984 no tendrá tanta sorpresa y a pesar de que esa novela me gusta bastante, después de leer Nosotros, es bastante obvio que Orwell, prácticamente, copió la idea. Estamos ante una sociedad gobernada por el Estado Único, una ciudad cercada por una muralla inmensa de vidrio verdoso que mantiene la naturaleza en el exterior (los números del Estado Único nunca han visto un animal). Su dieta está basada en un derivado del petróleo. Todo es de vidrio; las casas, los muebles, las máquinas. Todos visten igual, duermen a la misma hora (dormir también es una obligación), comen a la misma hora, se recrean a la misma hora y tiene relaciones sexuales programadas mediante cupones rosados que reciben previo inscribirse. En conclusión, son piezas de una máquina. Son “moléculas de un gran ser vivo”. Pero la principal obligación de los números – porque no son individuos – es la de ser feliz. La felicidad se basa en ser parte del todo, de tener una tarea a la que dedicarse, a la sumisión a la Tabla de las Leyes que consta de una lista de horarios y tareas que todos deben cumplir, sin falta. La vida de D-503 es plena y feliz (eso es lo que él creo, lo que le han hecho creer) hasta que conoce a una mujer que le abrirá los ojos a un mundo oculto, y este contaminará sus pensamientos, y le provocará una enfermedad: tendrá un alma. Podemos contemplar en nosotros el despertar de un individuo que ha sido adormecido por la costumbre y la falsa seguridad, y la ilusión de libertad y felicidad de una sociedad ficticia, donde las leyes han sido llevadas al nivel de religión y las personas han perdido su individualidad por completo. Al principio, cuando un médico le diagnostica que tiene un “alma” y que está enfermo, D-503 se asusta y hasta llega en pensar en que le extirpen el alma quirúrgicamente, cosa que en esta sociedad es posible. Desde la aparición de I-330 hasta el desenlace, nuestro pobre D-503 vivirá una vorágine de estados mentales, emocionales, incluso descubrirá sentimientos y sensaciones que ignoraba que podía tener, creerá que está enfermo, pensará en el suicidio, pensará en escapar, pensará en la rebelión. Ursula K. Le Guin dice en uno de sus ensayos que un buen relato es aquel que plantea una pregunta y la pregunta de nosotros es ¿qué es la libertad? ¿soy realmente libre? O, ¿vivo una ilusión de libertad?